Médicos pueden negar el aborto
Ningún médico está obligado a practicar un aborto aun en las entidades federativas en donde está permitida esta práctica, para lo cual hay principio de valores que se llama “objeción de conciencia”, afirmó Martina Pérez Rendón, secretaria de Salud en el estado de Querétaro.
Aclaró que, aunque rechacen realizar la interrupción del embarazo, sí deben atender cualquier situación que llegue en proceso; es decir, un aborto inducido por la propia mujer.
“Si estos casos llegan a los hospitales se atiende a las mujeres y se da el manejo adecuado. Esto es algo que le debe quedar claro a la sociedad”, expresó.
Lo anterior tiene referencia luego de que el pasado 6 de septiembre la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) despenalizó el aborto; es decir, quitó la definición de delito, por lo que podrá practicarse en los hospitales del sector federal.
“Si una mujer en el estado se induce el aborto es un delito, lo que hace la despenalización es quitarle la característica de delito”, explicó Martina Pérez Rendón.
De igual manera comentó que para que pueda ser practicada la interrupción de embarazo en varios estados debe hacer una homologación de las leyes. En el estado de Querétaro es considerado un delito.
Pérez Rendón precisó que cuando se atiende un aborto en las unidades médicas del Gobierno del estado, éste no tiene ningún costo.
Sobre el tema reiteró que no tiene los argumentos técnicos y legales para ahondar sobre la resolución emitida en días pasados por la Suprema Corte de Justicia de la Nación.
“No tendría todos los argumentos técnicos y legales para comentar sobre este tema. Más bien esto es cancha de los diputados, del Tribunal y otros ámbitos relacionados con las cuestiones legales”, afirmó la secretaria de Salud en el estado de Querétaro.
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Además, argumentó que cuando una mujer llega con un aborto inducido, si bien se le debe atender, no se le debe estigmatizar por la decisión que haya tomado al haber interrumpido su embarazo.
Martina Pérez Rendón mencionó que la sexualidad debe ser ejercida con responsabilidad, y que en dado caso de que se tenga la intención de evitar un embarazo hay métodos gratuitos que están disponibles en las clínicas del sector público.
